No construimos OISY para que coincidiera con las billeteras que vinieron antes. Lo construimos para superarlos. Al entrar en la versión 1.0, ya admitíamos @dfinity (ICP), @Bitcoin y @ethereum: tres cadenas con diferentes arquitecturas, todas manejadas de forma nativa, en cadena, sin extensiones ni frases iniciales. Esa base temprana importaba. Demostró que podíamos construir infraestructura sin comprometer la custodia, la descentralización o la experiencia del usuario. v1.0 no fue un rediseño. Fue una reintroducción. Fue entonces cuando @solana se unió a la pila. Solana real. No envuelto. Sin puentes. Sin UX adicional. Simplemente toque y use. La interfaz se tensó. Los tiempos de carga disminuyeron. Fichas mostradas con más contexto, menos ruido. A partir de ahí, el crecimiento se aceleró. v1.1, v1.2, v1.3 - cada uno agregó algo nítido, algo funcional, algo fundamental. @0xPolygon. @arbitrum. @BNBCHAIN. @Base. Limpiamos el filtrado de red, introdujimos el modo de privacidad, lanzamos una libreta de direcciones completa e hicimos que la habilitación de tokens fuera tan simple como tocar un enlace. Las últimas versiones, hasta la 1.6, son más silenciosas, pero igual de profundas. La navegación móvil se volvió más precisa. Las pantallas de activos adquirieron una nueva lógica. Rediseñamos la forma en que se muestran los títulos, los íconos y los precios de los tokens para crear algo más tranquilo y legible. Se reconsideró cada parte de la interfaz. Todas las pantallas ahora reflejan el mismo principio: menos fricción, más control. Sprinkles también maduró. Lo que comenzó como un experimento de recompensa ligera ahora impulsa una distribución continua en la cadena. Sin paneles. Sin reclamos. Simplemente funciona, como debería. Y junto con todo esto, la comunidad creció. Todos los idiomas que admitimos hoy; desde vietnamita y portugués hasta italiano, francés, alemán, checo y chino, ha sido impulsado en su totalidad por los usuarios. Traducido, revisado y actualizado por colaboradores que ofrecieron su tiempo como voluntarios porque creían en lo que estábamos construyendo. Nuestro grupo de probadores superó los 100 colaboradores a principios de este año. Desde entonces, se ha convertido en algo más deliberado. La membresía se filtra y actualiza regularmente para mantener el grupo amplio en perfiles de usuario pero limitado en enfoque; colaboradores que no solo están activos, sino que están profundamente comprometidos en ayudarnos a mejorar. Prueban bajo presión nuevas construcciones, marcan casos extremos y constantemente muestran fricción en el mundo real antes de que llegue a producción. Ese ciclo de retroalimentación se ha convertido en una de nuestras mayores fortalezas. El soporte ahora es rápido, directo y manejado en tiempo real por la propia comunidad. Los errores se registran. Las preguntas son respondidas. Nada espera. OISY v1.6.x no es la línea de meta. Es la base. Cada lanzamiento hasta ahora ha empujado hacia el mismo objetivo. No solo una billetera que funciona. Una billetera que resiste el uso real. Que se adapta a las nuevas cadenas sin confundir al usuario. Eso hace que DeFi se sienta utilizable sin diluir sus principios. Pronto compartiremos más sobre lo que viene con v2.0. Pero hoy se trata de reconocer el camino hasta ahora. Desde unas pocas cadenas y una nueva idea hasta una billetera de pila completa y cadena cruzada, construida en público, probada por cientos, traducida por la comunidad y aún sin compromisos en su compromiso con la descentralización. Estamos orgullosos de lo que se vive ... y más convencido que nunca de lo que viene después. [ ]